El fiel de la balanza de la comunicación de masas es la verdad.
La sociedad civil como consumidora de la información difundida por la prensa y por el gobierno, ha de recibir siempre noticias veraces. Aquí está la regla de oro.
Ni las triquiñuelas, ni las falacias del espantapájaros, ni los berridos demagógicos, ni el silencio sepulcral de la #corteprofunda… podrán ocultar la espantosa impunidad del último cuarto de siglo… Tampoco podrán impedir el desarrollo de la conciencia civil… ¡No hay marcha atrás!…